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Me gusta del kirchnerismo su capacidad para meter un dedo en el panal de la derecha (expresión más o menos análoga a otra popular) y hacerlos revolotear como si tuvieran la misma cantidad de neuronas que esos bichitos meleros. Un buen ejemplo de estupidez es pensar cuánto se alteraron estos alados ridículos con la conformación del grupo Carta Abierta, y ver que una de las principales críticas que esputaron en su contra es que eran "intelectuales pagos". ¡Con todo gusto que así lo fueran, si así lo fueran! ¿Qué tiene de malo? ¿Es inmoral retribuir monetariamente a quienes ponen a disposición su capital cultural? ¿Hay que pagarle en especie a esos inmaculados seres humanos? ¿Los Think Tank son ad honorem? Media pila.

Ya que estoy, sigo jodiendo, y tiro un interrogante cartesiano de base. Regla primera del método: no asentir a algo que no se perciba clara y distintamente, evitando empero tanto la precipitación como la precaución. La última partecita de la cosa me gustó. Nuestros legisladores parecen no conocer la obrita del Renato. Discuten y discuten cómo pagar una deuda que crece a medida que discuten...