sábado, 1 de agosto de 2009

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Si digo que empecé la carrera de filosofía este año, me dicen que hablo como ingresante de filosofía. No sé si será resentimiento contra los que elegimos eso en lugar de veterinaria, abogacía, geología, paleontología, o lo que sea, pero cuando decía que había empezado computación, no me decían que hablaba como ingresante de computación, ni cuando decía que había empezado inglés me decían que hablaba como ingresante de inglés.

11 psicomentario(s):

Anónimo dijo...

Estás perseguido nomás.

franco dijo...

No, no es únicamente paranoia. Evidentemente soy paranóico, pero no es sólo eso. Revelarse estudiante -y, para peor, Dios no lo permita nunca más, de primer año- le quita un setecientos por ciento de credibilidad ante los ojos de los boludos. Por suerte, hay momentos de esperanza en los que llego a creer que existe gente que no es boluda en este sentido.

Anónimo dijo...

Meh, se nota que estás en primer año de filosofía. Ok, no.

Juan Rizzo dijo...

Y... empíricamente, un poco de razón tienen (no sé si en tu caso, pero sí en unos cuantos otros). Pero no es nada de qué preocuparse. Lo feo no es que piensen que hablás como ingresante de filosofía, lo jodido es que les da una excusa para no prestarte atención. Los de otras carreras, no se toman el trabajo de escuchar, porque total "sos de filosofía". Y los de los años avanzados de tu propia carrera, tampoco, porque total "recién empezás". En fin, como diría el amigo Estagirita "boludo se dice en muchos sentidos". Pero no es razón para callarse la boca.
Un abrazo.

Juan Jose dijo...

Para mí el problema es mucho más amplio. En esta sociedad el saber no está delimitado por los conocimientos que albergues en tu cabeza sino por el título que poseas. El hecho de ser de primer año te aleja de ese papel mal llamado diploma que para muchos imbéciles representa sapiencia. También pasa con los que no estudian que por el hecho de no poseer el certificado de secundario son calificados de ignorantes. A esta gente muy boluda no le dijeron que Cohelo, Borges, etc. no terminaron el colegio.
Tampoco les dijeron que el saber no se certifica con un papel firmado, menos por una "hojita" que señala que terminaste colegio o universidad, cuando esas dos instituciones crean tontos robotitos al estilo de la película The Wall.
En fín, la sociedad y esa gente del Post tienen oídos sólo para lo que quieren escuchar. Sinceramente, no quieren escuchar nada que tenga un correlato con pensar. Para escuchar algo te exigen títulos de universidades o escuelas, justamente porque son esas instituciones las que atentan contra el pensar y criticar. Y así, a los que escuchan, son únicamente a los graduados de los institutos deformadores educativos, que rara vez piensan. Por último, si una persona todavía no modelada por esas instituciones habla no es escuchada, justamente porque no tiene el título de las mismas. Y sí por fín, una persona agraciada que obtuvo un título, todavía logra pensar y habla, está tan sólo pobrecito que prefiere callar o que nadie lo escucha.
Pensándolo bien, si el objetivo es que la gente que piense no hable (como de seguro es) esa "gente" a la que te refeís en el Post es muy inteligente en su estupidez.

franco dijo...

Jajaja. Era un dato gracioso solamente, escrito desde una histeria que intentaba emular la que me molesta... ¿quién, honestamente, diría que alguien tiene "resentimiento" en su contra? jaja Esa es la palabra más histérica del universo cuando se la usa en primera persona. Igual, la onda era esa. Que ser estudiante de filosofía afecta los oídos de los boludos aparentemente. Todo bien. Escribir no va a los oídos. Por eso escribo.

J dijo...

A quién le importa que un boludo lo escuche. A otro boludo. No jodamos. Yo, sin ni siquiera el título secundario, me gratifico con que personas cuerdas me den algo de bola, y me cago de risa cuando boludos como esos te descalifican y stuff. Aunque no recuerdo que me haya pasado, calculo que es entre hombres la cosa. Pero igual, che's, media pila.

Juan Jose dijo...

Muy buen punto el de Jazmanzana, los hombres no tenemos senos, por ello somos los que nos quejamos de que ocasionalmente algún boludo no nos escuche. Una de las ventajas de ser mujer: no importa que tengan que decir, siempre son oídas (casi nunca escuchadas) jaj.
Perdón por lo largo del comentario anterior, creo que se notó demasiado el desprecio por la masa de población a la que me referí, y no incluí la palabra resentimiento porque es todo lo contario a lo que me pasa, es más lástima, pero no en el sentido despectivo. Las normas según las cuáles filosofía es una carrera desprestigiada, profundamente apartada de la política, y que el saber está representado por un papel, son emanadas por un circulo de personas limitado, con intenciones claras. La masa (si es pertinente esa calificación) apoya esos sectores por ignorancia. No me cabe de otra forma que el pueblo apoye al campo cuando hace cuatro días Llambías idolatró a Martinez de Hoz.
Me disculpo de nuevo por la longitud de lo que escribí, entendé que estoy leyendo demasiado a un gallego jaja.

franco dijo...

Jjajaja. El tipo pide disculpas por haber usado su libertad :P Metete la cordialidad en el orto o en el blog de Luis Madrigal.

Juan Jose dijo...

Por cierto, el gallego era Ortega y Gasset.

Georgia SinClaire dijo...

xq el estudiante de filosofía es muy molesto! no es que yo sea prejuiciosa eh.. :P

 

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