Nos damos el lujo de hacer chistes aún conociendo las atrocidades que ocurren continuamente. Hasta escribimos libros de ética, otros chistes. Somos humoristas, bufones de nacimiento. Que exista un puñado de personas devotas a ciertas causas, siempre parciales, siempre insuficientes, no cambia nada nuestro destino de indiferentes irredimibles. ¿Qué lector de este blog vale cuánto? Y el escritor peor, sembrando el germen de la palabra, letra por letra, espacio por espacio, atrapando a un número reducido de presas de la curiosidad o el afecto mísero por el artista atrás del verbo, impidiéndoles terminar su acto de lectura, su inmersión en un proceso de interpretar, haciendo inacabable la tortura de cumplir con este ridículo acto inicial de: recorrer el texto entero y comentar después. Acepten mis pautas, que mucha gente muere entre tanto a causa del desamparo y las malas voluntadas. La inmoralidad es la ley. Siempre fue y siempre será.
miércoles, 18 de julio de 2012
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1 psicomentario(s):
Brutal.
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