martes, 8 de diciembre de 2009

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Muchas personas siguen vivas porque las cárceles son demasiado incómodas. Y no es desidia, es instinto de conservación de parte de quienes quedarían expuestos en caso de mejorar las condiciones de las mismas. Es una relación inversamente proporcional entre los que podrían morir y los que matarían. A mayores niveles de comfort adentro, menor nivel de tranquilidad de quienes estén afuera despertando altos niveles de deseo de asesinarlos. Se seguiría esta lógica sólo en casos de el crimen fuera el producto de una decisión tomada con cierta libertad.
Me imagino las cárceles con sofá, home theatre, biblioteca, wi-fi, y sin la negación al contacto heterosexual... qué masacre.

2 psicomentario(s):

Anónimo dijo...

contacto heterosexual?? no limitemos la cuestión... jajaj
Creo que si se implementa ese nivel de confort en las carceles los agentes inmobiliarios se verian en las apuradas a tasar esas parcelas de restringida libertad, total que diferencia puede haber entre una carcel con mucho confort y un departamento con la television todo el dia encendida, no?

franco dijo...

Es que las cárceles acá son o de hombres o de mujeres, y eso hace que el contacto heterosexual tienda a cero. Si te gusta alguien del mismo sexo, podrían ir los dos presos y disfrutar el comfort. En cambio, si la cosa es heterosexual, te jode de todas formas, por más comfort que tengas... a eso iba.
Y sobre las inmobiliarias, estás en lo cierto. Hasta creo qeu tenés una inmoviliaria vos jajaja
¿identidad necesariamente oculta?

 

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